Toma de inventario físico

 

Ya estamos cerrando el mes y como es sabido en las empresas por control interno se hace una toma de inventario físico cada fin de mes en el almacén o almacenes que tengan las empresas.

 Previamente el responsable del almacén debe estibar y acomodar todos los productos en las áreas asignadas para cada producto, el almacén tiene que estar perfectamente limpio y en óptimas condiciones.

 El área de contabilidad es la encargada de verificar las existencias y estado físico en conjunto con el responsable del almacén, en algunas ocasiones también interviene personal del área de ventas.

 Al comenzar el recorrido por el almacén, se verifica la relación de los productos a considerar, se cuentan por estibas, camas, bultos, frascos, barras, se cercioran de las fechas de caducidad en caso de ser productos destinados a la alimentación, productos farmacéuticos o perecederos.

 Se revisa el estado físico de dichos productos, que no estén abolladas las latas, que no estén rotos los frascos, que las bolsas no estén rasgadas, y los productos estén acomodados por lotes o fechas de entrada, esto es para no entregar producto de reciente almacenaje en vez de producto con mayor tiempo en dicho almacén.

 En caso de existir mercancía que deba ser pesada serán llevarlas a una báscula sin dañar los empaques o cajas para tomar nota de los kilos que representa dicha mercancía.

 Se deben ir dejando marbetes o marcas indicando que la mercancía ya fue contada y/o pesada para alguna verificación posterior, esto con la finalidad de no perder tiempo en un recuento adicional.

 Al terminar el conteo físico se procede a validar la información recabada con los registros que se tienen en kárdex o auxiliares, para detectar diferencias en dichos registros, en caso de persistir las diferencias, se tendrá que volver a recontar la mercancía, se tendrá que pesar nuevamente, se deberá considerar la mercancía que venga en tránsito hacia el almacén, revisar que en el auxiliar estén registradas todas las facturas por ventas, las devoluciones de producto e incluso las facturas que puedan estar canceladas.

 Una vez realizadas estas acciones nuestro inventario habrá concluido, para seguir con la operación del día a día ; y dar certeza de que la mercancía si existe y está bien valuada.

 Por L.C.P. Gonzalo Martínez Pérez*